La Rid铆cula idea de no volver a verte.
Leer "La rid铆cula idea de no volver a verte" inmediatamente
despu茅s de haber le铆do "L谩grimas en la lluvia", es un vertiginoso salto
del amenazante futuro al imposible escapar de lo que tenemos en mente presente.
Mientras que en la amenaza futura podemos so帽ar con un atisbo de esperanza (en cualquier momento el curso del mundo podr铆a cambiar o al menos saltar todo por los aires estrell谩ndonos con un planeta al estilo "Melancol铆a" :)) ), la amenaza a tiempo presente de la insoportable idea que supone la p茅rdida de nuestros seres m谩s queridos es algo de lo que ning煤n vivo puede escapar. Nunca. No hay futurismo ni ciencia-ficci贸n capaz de reinventar m谩s angustia.
Cada vez se lleva menos poner etiquetas, pero si hay que elegir yo elegir铆a 茅sta: las personas aterrorizadas con su propia muerte, y las personas aterrorizadas m谩s por la de sus seres queridos.
Pertenezco al segundo bando, no tengo demasiado temor a la muerte en s铆, creo tener una profunda conciencia de este extra帽o viaje, que aun siendo raro, podemos y debemos convertir en celebraci贸n, aunque ni siendo la party m谩s divertida jam谩s montada nadie se quedar谩 en ella eternamente. Todos nos vamos, los alegres/los tristes/los dicharacheros/los taciturnos.
La muerte encuentra el momento de cortarnos el rollo a todos, no hay poder ni pasta con la que convencerla para que aguante un rato m谩s en la fiesta, por lujosa que sea, por prometedora que luzca. Todos somos demasiado iguales siendo mortales, animales humanos y no humanos.
Es rid铆culo tener excesivo miedo a lo evidente sin escapatoria, es rid铆culo temer a nuestro limitado tiempo si no existe otra posibilidad, pero abrumador es ser testigo atado de pies y manos de la desaparici贸n de los que amamos. Es un miedo que la mayor铆a compartimos, cuando "compartirlo" quiere decir todo lo contrario a "comunicarlo", puntos comunes que ocultamos y disimulamos constantemente.
El libro de Rosa Montero es la liberaci贸n exquisita del prejuicio, sin malgastar un segundo m谩s en disimular la mortal esencia de la vida, abri茅ndose las entra帽as y dejando que la falta de miedo se encargue de poner todo en su lugar; hablando de la muerte como pocos se atreven, sin perderse en met谩foras ni tributos con tufo a flores f煤nebres. Es una obra que muchos han interpretado como optimista y vital, pero hay tanta autenticidad en crudo que algunos nos hemos dejado arrastrar con ella por la sombra m谩s oscura y siniestra del amor; cuando la certeza de que 茅ste siempre nos traiciona si no por una cosa, por otra, pero destinado a ser como la vida, o peor a煤n, pues 茅l siempre se va antes que ella.
Pero cuanto m谩s leo m谩s me doy cuenta de que una de las grandes cosas por las que merece la pena sobreponerse a ese desencanto vital es la posibilidad de encontrar a quienes no temen y aprender de ellos, o si no se nos da bien aprender al menos dejarnos inspirar por la delicadeza y la poes铆a de sus vidas por momentos y en cualquier instante. Siempre son los mismos los que nos suben el tono, los valientes y los generosos. ¿Dije que todos somos iguales ante la muerte? S铆, pero no todos somos iguales tras ella.
Para demostrarlo, este libro con la extraordinaria esencia de una simple mortal tras la marcha definitiva de muchas de sus huellas.
Mientras que en la amenaza futura podemos so帽ar con un atisbo de esperanza (en cualquier momento el curso del mundo podr铆a cambiar o al menos saltar todo por los aires estrell谩ndonos con un planeta al estilo "Melancol铆a" :)) ), la amenaza a tiempo presente de la insoportable idea que supone la p茅rdida de nuestros seres m谩s queridos es algo de lo que ning煤n vivo puede escapar. Nunca. No hay futurismo ni ciencia-ficci贸n capaz de reinventar m谩s angustia.
Cada vez se lleva menos poner etiquetas, pero si hay que elegir yo elegir铆a 茅sta: las personas aterrorizadas con su propia muerte, y las personas aterrorizadas m谩s por la de sus seres queridos.
Pertenezco al segundo bando, no tengo demasiado temor a la muerte en s铆, creo tener una profunda conciencia de este extra帽o viaje, que aun siendo raro, podemos y debemos convertir en celebraci贸n, aunque ni siendo la party m谩s divertida jam谩s montada nadie se quedar谩 en ella eternamente. Todos nos vamos, los alegres/los tristes/los dicharacheros/los taciturnos.
La muerte encuentra el momento de cortarnos el rollo a todos, no hay poder ni pasta con la que convencerla para que aguante un rato m谩s en la fiesta, por lujosa que sea, por prometedora que luzca. Todos somos demasiado iguales siendo mortales, animales humanos y no humanos.
Es rid铆culo tener excesivo miedo a lo evidente sin escapatoria, es rid铆culo temer a nuestro limitado tiempo si no existe otra posibilidad, pero abrumador es ser testigo atado de pies y manos de la desaparici贸n de los que amamos. Es un miedo que la mayor铆a compartimos, cuando "compartirlo" quiere decir todo lo contrario a "comunicarlo", puntos comunes que ocultamos y disimulamos constantemente.
El libro de Rosa Montero es la liberaci贸n exquisita del prejuicio, sin malgastar un segundo m谩s en disimular la mortal esencia de la vida, abri茅ndose las entra帽as y dejando que la falta de miedo se encargue de poner todo en su lugar; hablando de la muerte como pocos se atreven, sin perderse en met谩foras ni tributos con tufo a flores f煤nebres. Es una obra que muchos han interpretado como optimista y vital, pero hay tanta autenticidad en crudo que algunos nos hemos dejado arrastrar con ella por la sombra m谩s oscura y siniestra del amor; cuando la certeza de que 茅ste siempre nos traiciona si no por una cosa, por otra, pero destinado a ser como la vida, o peor a煤n, pues 茅l siempre se va antes que ella.
Pero cuanto m谩s leo m谩s me doy cuenta de que una de las grandes cosas por las que merece la pena sobreponerse a ese desencanto vital es la posibilidad de encontrar a quienes no temen y aprender de ellos, o si no se nos da bien aprender al menos dejarnos inspirar por la delicadeza y la poes铆a de sus vidas por momentos y en cualquier instante. Siempre son los mismos los que nos suben el tono, los valientes y los generosos. ¿Dije que todos somos iguales ante la muerte? S铆, pero no todos somos iguales tras ella.
Para demostrarlo, este libro con la extraordinaria esencia de una simple mortal tras la marcha definitiva de muchas de sus huellas.